Aunque la dedicatoria está fechada en 1933, se trata de un estudio académico, realizado diez años antes en Madrid, en la Escuela Especial de Escultura, Pintura y Grabado, más conocida como Academia de Bellas Artes de San Fernando.

En su libro Vida secreta, Dalí no escatima calificativos al deplorar el atraso de Madrid en cuestión de artes plásticas durante su época de estudiante; con una sola excepción: Daniel Vázquez Díaz, que había asimilado las tendencias postimpresionistas y que, sin llegar al cubismo, estaba influido por él. Vázquez Díaz optaba a la cátedra de Pintura al Aire Libre, que fue concedida a otro artista. Dalí encabezó las protestas y, como consecuencia de ellas, fue expulsado de la Academia de San Fernando en otoño de 1923.

El pintor catalán Rafael Durán Camps, a quien va dirigida la dedicatoria, se formó de manera autodidacta junto a Joaquim Mir y estuvo vinculado a Eugenio d’Ors. Como Dalí, pintó los paisajes de Cadaqués. En 1935 abrió una galería en París, que fue frecuentada por Picasso y Miró. Firmaba sus obras como Durancamps.

Este dibujo es fruto de las tendencias clasicistas del noucentisme orsiano, con influencias de Cézanne y Joaquim Sunyer.