Es un concepto utilizado en el campo de la ingeniería de materiales y la mecánica de sólidos para describir el punto en el que un material comienza a deformarse de manera permanente después de ser sometido a un esfuerzo. Se refiere al límite máximo de esfuerzo que un material puede soportar sin experimentar una deformación permanente o plástica.
Cuando un material se somete a un esfuerzo, como una fuerza aplicada, experimenta una deformación elástica inicial, es decir, se deforma temporalmente. Si la fuerza se retira y la deformación vuelve completamente a su forma original, el material se encuentra dentro de su rango elástico y no ha alcanzado su límite. Sin embargo, si el material ha sido sometido a un esfuerzo suficientemente alto, puede entrar en un régimen plástico, y parte de la deformación será permanente incluso después de retirar la carga.
El límite elástico es una propiedad importante para entender el comportamiento de los materiales bajo carga y es un parámetro clave en el diseño de estructuras y componentes para garantizar la seguridad y la integridad del material utilizado. Este concepto es especialmente relevante en la ingeniería de materiales y la industria de la construcción.