Privilegio frente a terceros que tienen los accionistas de una sociedad mercantil, en determinado momento y con ciertos límites, para adquirir nuevas acciones en caso de aumento de capital social mediante una nueva emisión de acciones. De este modo, se respeta la proporción en el capital social que tiene cada socio, al no disminuir su participación debido a la ampliación de capital con aportaciones de terceros.