Corporación británica de aseguradores individuales integrados en varios grupos independientes entre sí, que se denominan sindicatos, los cuales aceptan riesgos a través de sus propios miembros, llamados underwriters
Los underwriters son las únicas personas que, como miembros del Lloyd’s, pueden aceptar seguros. Responden con su patrimonio personal de las obligaciones económicas contraídas al aceptar el riesgo. Para ser underwriters se exige ser presentado por un miembro del Lloyd’s y ser amparado por otros cinco, lo que supone, por tanto, que el nuevo miembro ha de tener una fuerte solvencia financiera.
Existen en el Lloyd’s varios miles de underwriters; esto supondría que cuando se tratara de buscar cobertura para un riesgo con un elevado capital asegurado, sería preciso conseguir la suscripción de muchos underwriters, para que cada uno de ellos pudiera asegurar una parte de dicho riesgo. En evitación de este trámite laborioso, se crearon en el Lloyd’s los sindicatos, que son agrupaciones de varios underwriters que, por tanto, pueden aceptar porciones mucho mayores de cada riesgo.
Los riesgos sólo pueden ser presentados a la aceptación de los underwriters a través de los brokers o firmas de corredores de seguros.
Los brokers, para actuar, precisan de un reconocimiento previo por la Corporación del Lloyd’s, pero no restringen sus funciones a este organismo, pudiendo, si lo consideran conveniente, colocar el seguro en cualquier otra compañía aseguradora.
El sistema de colocación de un riesgo es el siguiente: el broker que quiere hacer un seguro, confecciona previamente una pequeña nota, denominada slip, en la que se recogen los detalles característicos del riesgo cuya cobertura busca. El broker presenta dicho slip a los underwriters y va distribuyendo las porciones de riesgo entre aquellos que las aceptan, eligiendo los que facilitan una cotización de prima más favorable. Los underwriters aceptantes van anotando en dicho slip la porción de riesgo que asumen en nombre de su sindicato respectivo, haciendo constar al mismo tiempo sus iniciales y su firma. Estas anotaciones se van haciendo una debajo de otra, de donde proviene precisamente la denominación underwriter («que suscribe debajo»). Una vez distribuido el total del capital asegurado, el slip se presenta al «Lloyd’s Policy Signing Office» (Oficina de firma de pólizas del Lloyd’s), donde se confrontan los detalles de dicho slip y se emite la póliza con el sello de la citada oficina, requisito sin el cual ninguna póliza es válida.
La misión del Lloyd’s no es sólo aceptar seguros o reaseguros, sino también obtener información sobre todo tipo de buques y sus travesías en cualquier momento, información ésta de suma utilidad para todas las compañías que trabajen el seguro marítimo. Igualmente el Lloyd’s tiene distribuidos por todo el mundo varios miles de agentes y subagentes que actúan como representantes de la corporación y no como agentes de seguros. Son estos agentes los que facilitan la información marítima referida, pudiendo encargarse también, en nombre del Lloyd’s, del arreglo de siniestros.
El Lloyd’s nació en 1688 en un café de Londres propiedad de Edward Lloyd. Los parroquianos eran todos patrones de buques, banqueros o comerciantes y allí se formalizaban los seguros marítimos, además de constituir un centro de información sobre todo lo relativo a buques o navegación. Con el paso del tiempo, el café Lloyd empezó a ser importante, incluso después de la muerte de su propietario en 1713, y especialmente a partir de 1771, año en el que se sientan las nuevas bases de su funcionamiento. Por Acta del Parlamento en 1871, el Lloyd’s es reconocido como una corporación. Actualmente trabaja todos los ramos del seguro
Diccionario de seguros