El mal uso de las sillas de niños es una preocupación significativa y puede comprometer la seguridad de los niños durante los viajes en automóvil. Aquí hay algunos ejemplos comunes de mal uso en sillas de niños:
- Instalación incorrecta: la instalación incorrecta de la silla infantil es uno de los problemas más comunes. Esto incluye no asegurar correctamente la silla con el cinturón de seguridad del vehículo o no utilizar adecuadamente el sistema de anclaje ISOFIX.
- Orientación incorrecta: utilizar la silla en la orientación incorrecta según el peso y la edad del niño. Por ejemplo, algunos padres pueden cambiar al niño a una silla orientada hacia adelante antes de que sea seguro hacerlo.
- Correas del arnés mal ajustadas: las correas del arnés deben ajustarse adecuadamente para garantizar la seguridad. El mal uso incluye tener las correas demasiado sueltas, torcidas o ubicadas incorrectamente en los hombros del niño.
- Uso de accesorios no homologados: el uso de accesorios no homologados, como cojines o almohadillas, que no son parte integral de la sillita, puede afectar la seguridad de los niños.
- Transición prematura: cambiar a un niño de su sillita al asiento del coche antes de que haya alcanzado la altura y el peso indicados por las normativas de seguridad pone en peligro su seguridad.
- Uso de sillas caducadas: las sillas para niños tienen una vida útil limitada, no sirven para siempre. El uso de una silla infantil que ha caducado puede comprometer su integridad estructural y su capacidad para proteger al niño en caso de un siniestro vial.
- Uso de sillas dañadas: las sillas dañadas, ya sea por un siniestro de tráfico o por otro motivo, no ofrecen la misma protección que una silla en buen estado.
- Niños fuera del rango de peso y altura: colocar a un niño en una silla que no es adecuada para su peso o altura puede poner en peligro su seguridad.
Es fundamental que los padres y cuidadores sigan las instrucciones de los fabricantes de la silla y del coche, así como la normativa en vigor, para garantizar la seguridad de los niños durante los viajes en automóvil.