Ante el elevado número de siniestros con lesiones de usuarios de motocicletas compartidas, el presente trabajo pretende poner el énfasis en aquellos aspectos que las compañías de sharing de motocicletas pueden mejorar a corto plazo para erigirse en contribuidores netos a los objetivos mundiales y nacionales de reducción de la siniestralidad vial: en concreto, a la reducción antes de 2030 de un 50% en el número de fallecidos y lesionados graves y a alcanzar el Objetivo Cero antes de 2050.
Este estudio quiere dar una visión constructiva y optimista, y hacer propuestas para conseguir en los próximos dos años que la movilidad compartida sea el tipo de movilidad más segura de todas. Así, en positivo, este trabajo destaca un gran número de buenas prácticas entre las empresas que ya operan en España y ofrece un decálogo de acciones concretas que permitan mejorar.